1080p y upscale vs. 4K. ¿Cuáles son las diferencias?

Si has estado buscando un nuevo televisor, has trabajado en la edición o grabación de vídeo o has buscado monitores para un ordenador, es muy probable que hayas oído hablar de los términos 4K y 1080p. Si ese es el caso, probablemente también te hayas preguntado cuál es la diferencia entre ambos, o cuál es mejor para tu situación específica. ¿Es uno mejor que el otro? ¿Es más caro? En general, ¿merece la pena el precio extra?

Echemos un vistazo a las respuestas a algunas de esas preguntas, y averigüemos exactamente cuál es la diferencia entre 4K y 1080p y el upscale.

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• Términos importantes para entender el 1080p, el upscale y el 4K

• La diferencia entre un televisor 1080p y uno 4K

• 1080p vs. 4K para grabar y editar vídeos

• Las mejores resoluciones para los juegos

• Qué hay que tener en cuenta

Antes de profundizar en la diferencia entre 4K y 1080p, es importante aclarar algunos términos que se prestan a una mejor explicación de ambos.

Píxel es la abreviatura de "elemento de imagen" y se refiere a los pequeños puntos que componen las imágenes de un monitor de ordenador o un televisor. Cuantos más píxeles tenga una imagen, más claramente se podrá definir. Por tanto, estos píxeles constituyen la "resolución" de la imagen.

La resolución de la imagen se refiere al número de píxeles de una sola imagen. Este tamaño de resolución se identifica a veces tanto por la anchura y la altura de la imagen como por el número total de píxeles que contiene. Por ejemplo, un televisor de 720p tiene 1.280 columnas y 720 filas de píxeles, lo que le da la denominación de 720p.

El reescalado a 4K se refiere al proceso en el que cada píxel de un fotograma de 1080p se sustituye por cuatro píxeles en un fotograma de 4K, aumentando así la resolución. Puede dar peores resultados que un vídeo 4K verdadero, ya que podría introducir artefactos, que son patrones no deseados que aparecen en la imagen.

Ahora que entendemos las definiciones de 1080p y 4K, podemos echar un vistazo a algunas de las diferencias entre ambas.

En los últimos años, los televisores más populares han sido 720p, 1080p y 4K. Si nos fijamos en los términos que utilizamos para describirlos, está claro que un vídeo creado en 720p tiene 1.280 columnas y 720 filas de píxeles, lo que le da 921.600 píxeles de resolución y claridad. Durante mucho tiempo, ese fue el estándar de la industria y era completamente aceptable para la gente que compraba televisores o grababa vídeos con la mayor claridad posible.

El 1080p, de nuevo utilizando los términos comentados, consta de 1.920 columnas y 1.080 filas de píxeles para un total de 2.073.600 píxeles, más del doble que un vídeo 720p. Esto realmente mejoró lo que era posible en la grabación y visualización de vídeo, y creó un nuevo estándar para lo que la gente estaba buscando en sus televisores.

Luego tenemos el 4K. Dado que la forma más común de describir el 4K difiere del formato 720p y 1080p, se vuelve un poco más confuso lo que realmente implica el 4K. En realidad, 4K también podría describirse como 2160p, porque contiene 3.840 columnas y 2.160 filas de píxeles. Teniendo esto en cuenta, podemos decir que 4K es claramente el nivel más alto de resolución, compuesto por 8.294.400 píxeles, cuatro veces más píxeles que 1080p. Además de 4K o 2160p, es posible que veas esta resolución también referida como Ultra HD o UHD.

Aunque el 4K era antes tan caro que los consumidores normales no podían comprarlo, el precio ha bajado a un nivel más razonable y los vídeos grabados en 4K ahora pueden ser vistos fácilmente por más personas.

Cuando se trata de televisores utilizados para mostrar vídeo 1080p o 4K, el tamaño solo supone una gran diferencia cuando el televisor es de un tamaño determinado. Por ejemplo, si quieres comprar un televisor de 24 pulgadas, no verás mucha diferencia entre las resoluciones 720p y 1080p. Teniendo esto en cuenta, verás una falta de diferencia similar entre 1080p y 4K con televisores de menos de 32 pulgadas. El principal caso en el que vas a ver una gran diferencia de calidad entre 4K y 1080p es cuando consideres las dimensiones de un televisor de más de 40 pulgadas.

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En cuanto a la resolución de detalles, el vídeo 4K tiene aproximadamente cuatro veces más detalles que el 1080p. Esto significa que puede capturar los detalles más finos del pelo y la hierba. Por lo tanto, el 4K es el camino a seguir si quieres crear un vídeo con un detalle y una resolución increíbles. Es el más adecuado para proyectos destinados a ser reproducidos en la gran pantalla.

Por otro lado, el 1080p ofrece un detalle y una resolución excelentes y es suficiente para producciones más pequeñas o contenidos en línea, como YouTube. Sólo que no se verá tan bien cuando se reproduzca en pantallas grandes.

Si decides grabar en 4K, será más fácil reducir la escala a 1080p durante el proceso de edición que aumentar el tamaño de un vídeo de 1080p a 4K. La reducción de escala conserva más detalles y da lugar a un producto final de mejor aspecto. Esto contrasta con el upscaling, que implica añadir píxeles a un vídeo. A menudo puede provocar una pérdida de detalles y artefactos, es decir, defectos que aparecen en la imagen.

Recortar un vídeo 4K también es menos complicado que ampliar un vídeo 1080p. En otras palabras, con 4K tienes más margen de maniobra durante el proceso de edición.

Por supuesto, para garantizar los mejores resultados de la edición, también necesitas un monitor 4K (con un tamaño de pantalla de 32" o superior) y una tarjeta gráfica con capacidad para 4K. Esto facilitará la edición, ya que podrás ver tu material en su resolución nativa.

Sin embargo, debes tener en cuenta algunos inconvenientes del 4K. Los archivos 4K son mucho más grandes que los 1080p, así que si trabajas con un espacio de almacenamiento limitado, los 1080p pueden ser una mejor opción.

Por último, los vídeos en 4K requieren más potencia de procesamiento. Por eso, si trabajas con un ordenador o portátil antiguo, es posible que no pueda manejar los archivos 4K tan bien como los 1080p.

Todavía no todos los dispositivos y programas son compatibles con los vídeos 4K, por lo que tendrás que asegurarte de que el software de edición que utilices sea compatible. Para ello, puedes utilizar Movavi Video Editor. Es un software potente y fácil de usar que ofrece funciones avanzadas para editar vídeos 4K y 1080p.

La demanda de altas resoluciones no se limita a los vídeos o las películas; muchos jugadores también buscan la mejor resolución para su experiencia de juego. Con los desarrolladores de juegos que lanzan juegos más exigentes desde el punto de vista gráfico, los entusiastas de los juegos también están mejorando su juego optando por televisores y monitores 4K.

Las últimas consolas requieren ahora televisores 4K para mostrar los juegos en su máximo potencial. Por ejemplo, la PlayStation 5 (PS5) ahora es capaz de jugar a 4K/60 FPS, que suele ser el valor predeterminado ahora para los juegos de PS5.

Es un paso adelante respecto a la PlayStation 4, cuyo valor por defecto es 1080p/30 FPS. Naturalmente, necesitarás un monitor 4K para igualar las resoluciones de los juegos de PS5. Sin embargo, los monitores de 1080p siguen siendo viables; los últimos juegos suelen ofrecer modos de 30 FPS para adaptarse a ellos.

La situación es similar para las series X y S de Xbox. La primera es capaz de jugar en 4K UHD real, mientras que la serie S de Xbox ofrece soporte para 1440p. Algunos juegos se ejecutan incluso a 120 FPS en la Serie X. De nuevo, un monitor 4K es ideal para sacar el máximo partido a estas consolas, pero mientras tanto, sobre todo si tienes un presupuesto ajustado, un monitor 1080p puede ser suficiente. En general, 1080p/60 FPS requiere menos GPU que 4K.

Por su parte, la Nintendo Switch es bastante singular ya que puede ofrecer resoluciones de hasta 1080p, pero solo cuando está acoplada y conectada a un televisor. Cuando está en modo portátil o en la Nintendo Switch Lite, se queda en 720p.

Por lo tanto, invertir en un monitor 4K para una Nintendo Switch sería un desperdicio, ya que la consola no está diseñada para ser tan potente como las series X y S de PlayStation 5 y Xbox.