¿Cuáles son los distintos tipos de formatos vídeo?

En el mundo actual, el vídeo es vital, pero no todos los vídeos son iguales. Existen varios formatos de archivo de vídeo entre los que puedes elegir. Cada tipo de archivo de vídeo tiene sus pros y sus contras, y en este artículo hablaremos de ellos.

Los tipos de formato de vídeo representan diferentes formas de almacenar los datos que componen los vídeos. Una forma de visualizar estos formatos es como contenedores. Los distintos contenedores almacenan los datos de formas diferentes. Algunos son mejores que otros para determinadas situaciones, esto dependerá del contexto. Después de todo, los datos que se almacenan (es decir, los datos visuales y posiblemente sonoros del vídeo) son los mismos.

Los formatos de archivos de vídeo existen porque esos datos pueden ser extensos y complicados. Es decir, los archivos de vídeo pueden alcanzar un gran tamaño rápidamente. Esto hace que sea difícil y costoso almacenarlos y compartirlos. Para resolver este problema, los desarrolladores crearon los códecs, que son programas que codifican los datos de vídeo para que sea más fácil almacenarlos y compartirlos. Los distintos códecs convierten los datos en distintos tipos de archivos de vídeo. Las extensiones de los nombres de los archivos se utilizan para identificar qué códec se ha utilizado para codificar un archivo de vídeo específico.

Hay muchos tipos diferentes de archivos de vídeo. Sin embargo, sólo unos pocos son lo suficientemente populares como para ser considerados estándar. Muchos tipos no son tan comunes como para que la mayoría de la gente se encuentre con ellos, por lo que no es usual que se incluyan en comparaciones o listas.

El formato de archivo de vídeo más común, MP4, forma parte de la familia MPEG. Aunque no ofrece una resolución tan alta como otros miembros del grupo MPEG, su calidad es buena para el tamaño relativamente pequeño del archivo que crea. Gracias a este equilibrio de especificaciones, MP4 es el estándar digital actual en Internet y también es habitual en televisión. Si quieres subir vídeos a Internet, ya sea a YouTube, Instagram o cualquier otro sitio, es muy probable que MP4 sea tu mejor opción.

Formato de archivo exclusivo de Apple, desarrollado específicamente para la aplicación QuickTime. Si comparas los archivos MOV con los MP4, puede que notes una diferencia obvia. No la extensión de vídeo, sino el tamaño: los archivos MOV son bastante grandes en general. Por esta razón, se suelen evitar al momento de compartir vídeos o subirlos a la web, ya que el gran tamaño de los archivos hace que las transferencias y subidas sean lentas y costosas. Sin embargo, el gran tamaño también significa que los archivos MOV pueden mantener una calidad extremadamente alta. Por lo tanto, los editores de vídeo suelen trabajar en MOV para poder editar con metraje de alta calidad. Por supuesto, una vez que termines de editar, es posible que tengas que convertir el archivo MOV a algún formato más comprimido, como MP4, pero ese es el precio de editar con material de alta calidad. Por fortuna, las herramientas de conversión como Movavi Video Converter facilitan este cambio.

Un formato de archivo de vídeo más antiguo desarrollado en la década de 1990. Una característica única de los archivos AVI es la calidad del audio. Como su nombre sugiere, los archivos AVI son conocidos por conservar un audio excelente. Por lo que son ideales para editar o ver vídeos en los que el audio es muy importante, como los vídeos musicales. Incluso puedes conseguir archivos AVI sin pérdida, que suelen ser los de mayor calidad posible. Si quieres mostrar tu vídeo en la televisión o en un sitio como Vimeo, AVI puede ser una buena opción. Sin embargo, su enorme tamaño (varios gigabytes por minuto de vídeo) puede dificultar las cosas a quienes suben o comparten sus vídeos en Internet.

En realidad, se trata de una familia de archivos de vídeo, todos creados para dispositivos con Windows. La familia se compone de varios códecs diferentes, y cada códec da lugar a un producto final ligeramente distinto. En general, los archivos WMV son conocidos por tener archivos pequeños. Eso significa que sea inevitable cierta pérdida de calidad, pero con frecuencia la reducción del tamaño del archivo merece la pena por la mínima reducción de calidad. Si trabajas en Windows, WMV puede ser una gran elección. Sin embargo, WMV no es el formato de archivo más común para compartir vídeos en línea, porque suele ser incompatible con dispositivos que funcionan con Apple, Linux u otros dispositivos operativos.

Desarrollado por Adobe para su uso con Adobe^® Flash^® Player. Los archivos FLV solían ser el tipo de formato de archivo de vídeo más popular. Sin embargo, todo eso llegó a su fin en 2020, cuando Adobe discontinuó Flash^® Player de forma oficial. Sin Flash^® Player, los archivos FLV normalmente no se podían ejecutar. En su lugar aparecía un mensaje de error. Como puedes imaginar, eso obligó a mucha gente a cambiar a otros formatos video, como MP4, que todavía son ampliamente compatibles. Los aficionados aún pueden utilizar archivos FLV con reproductores de vídeo de terceros, pero por lo demás, este formato de archivo ya no se utiliza.

Formato de archivo relativamente nuevo desarrollado por Google para su uso en la web. Fue lanzado en 2019, un año antes de que Flash^® Player fuera descontinuado. Google creó WebM pensando en internet. La idea era hacer un formato de archivo de vídeo que fuera lo más pequeño posible, manteniendo una calidad aceptable. El pequeño tamaño del archivo significa que los vídeos WebM se cargan muy rápido. Esto hace que sean excelentes para cualquier vídeo que pueda verse en línea. Las personas con conexión a Internet débil suelen beneficiarse del pequeño tamaño de los archivos de vídeo WebM. El único problema es que WebM aún no está ampliamente soportado. Algunos navegadores, como Safari, no admiten el formato, aunque se pueden descargar complementos de terceros que solucionan este problema.

Desarrollado para su uso en videocámaras de Sony y Panasonic. Los vídeos con este formato son de muy alta calidad. Sin embargo, la contrapartida es un tamaño de archivo mayor. Por esto, MP4 es más popular hoy en día.

MKV es un formato libre y de código abierto. El atractivo de MKV es su potencia. Puede soportar muchos tipos diferentes de códecs. Sin embargo, no está muy extendido. Si sabes que vas a reproducir tus vídeos en un reproductor multimedia compatible con MKV, como VLC, puedes utilizarlo. De lo contrario, lo mejor es optar por uno de los formatos de vídeo más utilizados.

Uno de los primeros del grupo de códecs de vídeo MPEG, que incluye nombres famosos como MPEG-4 (MP4). MPEG-2 suele utilizarse para grabar películas en DVD.

• Códec: Un códec es el programa que comprime un archivo de vídeo o audio.
• Bitrate: Medida de la tasa de información procesada, con frecuencia medida en megabits por segundo (mgps). En esencia es una medida de la calidad del vídeo, donde un bitrate más alto significa mejor calidad.
• Contenedor: Almacena todas las partes de un vídeo. Incluye la propia imagen, audio, metadatos, subtítulos y posiblemente más.
• Velocidad de fotogramas: El número de imágenes individuales (fotogramas) que se muestran por segundo. Una frecuencia de imagen más baja suele dar como resultado un vídeo menos fluido. La frecuencia de imagen más habitual es 24 (fotogramas por segundo). Sin embargo, también son comunes 25 FPS, 30 FPS, 48 FPS y 60 FPS.
• Resolución: Medida del número de píxeles de un solo fotograma o imagen de vídeo. Por lo general, más píxeles significa un vídeo más nítido, en el que se pueden identificar más detalles. Por el contrario, es común que una resolución más baja de lugar a vídeos borrosos, pixelados o menos definidos. Los vídeos suelen considerarse de alta calidad si tienen una resolución de al menos 720p (píxeles). Las resoluciones de alta definición más comunes son 1080p, 2K y 4K.
• Relación de aspecto: Describe la relación entre la anchura y la altura de un vídeo. Por ejemplo, un vídeo de 400 píxeles de ancho con una relación de aspecto de 4:3 tendría 300 píxeles de alto. Las relaciones de aspecto más comunes son 4:3 y 16:9.
• Compresión sin pérdidas: Tipo de compresión en la que no se pierde información. Esto suele significar una conservación total de la calidad del vídeo, aunque la contrapartida suele ser un mayor tamaño de los archivos.
• Compresión con pérdidas: También conocida como compresión irreversible, porque se pierde algo de información durante el proceso de compresión. El archivo comprimido resultante es una aproximación del original. Cuanto más comprimido esté un archivo, menos precisa será esa aproximación. En vídeo, esto se traduce en una menor calidad y, posiblemente, en la aparición de artefactos. A pesar de todo, la compresión con pérdidas se utiliza de forma habitual porque suele reducir el tamaño de los archivos de vídeo de forma considerable. Cuando se hace de manera correcta, o con moderación, la información descartada no es perceptible para el usuario final.

No existe un único formato de archivo de vídeo perfecto. Al elegir con cuál trabajar, ten en cuenta tus necesidades específicas, como el espacio de almacenamiento y el dispositivo o dispositivos que utilizarás para procesar y ver el vídeo. Afortunadamente, herramientas como Movavi Video Converter facilitan el cambio de un formato a otro en caso de que sea necesario.